El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, propuso al mandatario estadounidense, Donald Trump, actuar como mediador en el conflicto entre Washington y el régimen de Nicolás Maduro, en medio de una escalada militar en el Caribe. La oferta se formuló durante una reunión bilateral en Kuala Lumpur, Malasia, en el marco de la cumbre de la ASEAN, donde ambos líderes discutieron principalmente aranceles, aunque el equipo brasileño insistió en priorizar la crisis venezolana.
“Lula ha planteado el tema y ha dicho que América Latina y América del Sur es una región de paz y se ha ofrecido a ser un contacto, a ser un interlocutor, como ya lo ha sido anteriormente, con Venezuela para buscar soluciones que sean mutuamente aceptables y correctas entre los dos países”, declaró el ministro de Asuntos Exteriores de Brasil, Mauro Vieira. La reunión, que duró cerca de 50 minutos, se vio marcada por la discrepancia en la agenda: Trump había anunciado previamente que Venezuela no sería un tema a tratar, pero Lula y su delegación argumentaron que una intervención militar estadounidense podría desestabilizar la región e impactar directamente a Brasil.

Desde la Casa Blanca, la administración Trump mantuvo una postura distante respecto a la mediación de Lula, minimizando la relevancia del tema venezolano. En los últimos días, funcionarios estadounidenses han endurecido su retórica contra el narcotráfico en América Latina. Stephen Miller, subjefe de Gabinete y asesor de Seguridad Nacional, afirmó que el gobierno considera a los narcotraficantes como “terroristas” y advirtió que “los van a matar”. Al ser consultado sobre un posible envío de tropas a Venezuela, Miller evitó detalles, pero indicó que el Departamento de Guerra evalúa estrategias para combatir el narcotráfico y el terrorismo en el hemisferio occidental.
🇧🇷🇺🇸🇻🇪‼️ | ÚLTIMA HORA — El socialista brasileño, Lula da Silva le ofreció al presidente Donald Trump ejercer como mediador en medio de las tensiones entre Estados Unidos y la dictadura venezolana. pic.twitter.com/ZGmIoRv3Tf
— UHN Plus (@UHN_Plus) October 26, 2025
Trump anunció la ampliación de la campaña antidrogas con operaciones terrestres, sin especificar países. “La tierra será lo siguiente”, aseguró el presidente republicano antes de partir a Malasia, instruyendo al secretario del Departamento de Guerra, Pete Hegseth, a informar al Congreso sobre esta nueva fase. Trump ironizó sobre posibles rechazos legislativos, preguntando si preferirían “no detener el flujo de drogas”.
Escalada militar en el Caribe
La tensión se ha materializado en el despliegue del portaaviones USS Gerald R. Ford, el mayor de la flota estadounidense, en el mar Caribe. El Pentágono justificó la operación como una directiva presidencial para “desmantelar las Organizaciones Criminales Transnacionales y contrarrestar el narcoterrorismo en defensa de la Patria”. Sean Parnell, portavoz del Pentágono, detalló que esta presencia reforzada en el área del Comando Sur ampliará la capacidad para detectar, monitorear e interrumpir actividades ilícitas que amenazan la seguridad nacional y la estabilidad hemisférica.
El grupo de ataque del Gerald R. Ford se suma a una fuerza desplegada desde septiembre, que incluye tres buques de asalto y transporte anfibio, cazas F-35B, aeronaves de patrulla P-8 y drones MQ-9, con base en Puerto Rico. Estas acciones responden a la intensificación de operaciones contra embarcaciones sospechosas de tráfico de drogas en el Caribe y el Pacífico oriental.