Australia inicia los funerales de las 15 víctimas mortales del atentado terrorista perpetrado el domingo 14 de diciembre de 2025 en Bondi Beach, Sídney, durante un evento comunitario judío para celebrar el inicio de Janucá, en lo que se convierte en el tiroteo masivo más mortífero del país en tres décadas.
El ataque, confirmado como un acto terrorista inspirado en el Estado Islámico (ISIS), fue llevado a cabo por un dúo padre-hijo: Sajid Akram, de 50 años, abatido por la policía en el lugar, y su hijo Naveed Akram, de 24 años, quien sobrevivió herido, salió del coma y enfrenta cargos por 15 homicidios, 40 intentos de asesinato y un delito terrorista. Las autoridades alegan que actuaron para avanzar en una causa religiosa e infundir miedo en la comunidad. Los atacantes poseían rifles y escopetas de alta potencia adquiridos legalmente, y habían viajado semanas antes a una región militante en el sur de Filipinas. Naveed había sido investigado brevemente en 2019 por posibles vínculos con ISIS, sin hallazgos concluyentes.
Entre las víctimas fatales destacan el rabino asistente Eli Schlanger, padre de cinco hijos y conocido por su labor comunitaria en la sinagoga Chabad de Bondi —cuyo funeral se celebró este miércoles en dicha sinagoga—, una sobreviviente del Holocausto, un matrimonio que intentó detener a los agresores, y una niña de 10 años llamada Matilda. Además, 23 personas permanecen hospitalizadas, incluyendo un policía que perdió la visión en un ojo y un civil héroe que desarmó a uno de los atacantes y requirió cirugía.
La comunidad judía y sydneyense vive días de profundo duelo, con actos como un minuto de silencio en la playa, la cancelación de fiestas de Fin de Año y vigilias. Un joven local expresó: “Esta semana ha sido muy profunda, y esta mañana siento un sentido de comunidad uniéndose”. También surgieron críticas por el acceso a armas de los perpetradores.
El primer ministro de Nueva Gales del Sur, Chris Minns, anunció la reconvocatoria del parlamento para el 22 de diciembre con reformas en leyes de armas —como límites por persona y restricciones a escopetas— y normas contra protestas que generen tensiones, llamando a un “verano de calma y unión”. El primer ministro federal Anthony Albanese prometió erradicar el antisemitismo y reformas armamentísticas.
Internacionalmente, el presidente estadounidense Donald Trump condenó el “horrífico ataque terrorista antisemita” durante un evento de Janucá en la Casa Blanca, expresando condolencias y oraciones por los heridos.
