El presidente del Comité Noruego del Premio Nobel de la Paz lanzó duras acusaciones contra varios gobiernos extranjeros que, según dijo, han contribuido a fortalecer el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela. Durante su discurso en la ceremonia de entrega del Nobel de la Paz 2025, alertó que el apoyo de países como Cuba, Rusia, Irán y China —así como de la organización Hezbolá— ha hecho al régimen “más robusto y más brutal”.
Un reconocimiento histórico acompañado de una fuerte advertencia
Las declaraciones se produjeron en un contexto de alta visibilidad internacional: el premio fue otorgado a la dirigente opositora venezolana María Corina Machado, reconocida por su lucha a favor de la democracia, los derechos humanos y elecciones libres en Venezuela.
El Comité describió el modelo de gobierno de Maduro como “un Estado autoritario que ha destruido instituciones, silenciado a la oposición y generado una crisis humanitaria de escala global”. También destacó que la represión interna ha obligado a millones de ciudadanos a abandonar el país, dando lugar a uno de los mayores éxodos de la historia reciente de América Latina.
El papel de los aliados del régimen
De acuerdo con la exposición del Comité Nobel, el régimen venezolano se ha sostenido no solo gracias a su control del aparato estatal, sino también a la cooperación estratégica de gobiernos y organizaciones extranjeras que proveen:
- Armamento y equipamiento militar
- Tecnología de inteligencia y vigilancia ciudadana
- Apoyo financiero y operativo
Este respaldo, según el Comité, ha permitido que el gobierno venezolano mantenga su poder pese a la profunda crisis política, social y económica, aumentando la capacidad de represión frente a opositores y manifestantes.
Llamado directo a Maduro y a la comunidad internacional
En su intervención, el presidente del Comité exigió al mandatario venezolano reconocer la voluntad popular expresada en las elecciones de 2024 y facilitar una transición democrática inmediata. Subrayó que la victoria de la oposición en los comicios no debe seguir siendo ignorada ni bloqueada a través de medidas represivas.
Asimismo, hizo un llamado a la comunidad internacional para que no dé la espalda a la población venezolana, y para que se mantenga una presión diplomática constante sobre quienes colaboran con la consolidación del autoritarismo.
“Cerrar los ojos ante esta realidad es permitir que continúen los abusos”, advirtió, recordando que en el país existen presos políticos sometidos a torturas, desapariciones forzadas y condiciones de reclusión inhumanas.
Venezuela, símbolo de resistencia y alerta global
El Comité Nobel destacó que Venezuela representa hoy un ejemplo extremo de cómo un régimen puede mantenerse en el poder cuando encuentra sostén internacional para la represión y el control social. La situación del país, afirmó, debe servir como una advertencia al mundo sobre el impacto que tienen ciertas alianzas geopolíticas en la estabilidad democrática del hemisferio.
El galardón a María Corina Machado pretende ser, además de un reconocimiento personal, un mensaje de esperanza para millones de venezolanos que continúan reclamando una nación libre, y un recordatorio a la comunidad global de que la democracia debe ser defendida siempre y en cualquier lugar.
