El gobierno de Estados Unidos ha designado al Clan del Golfo, también conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), como una organización terrorista extranjera (FTO, por sus siglas en inglés), en una medida anunciada el 16 de diciembre de 2025 que intensifica la presión sobre el mayor grupo armado ilegal de Colombia.
Esta clasificación, publicada por el Departamento de Estado y el Tesoro estadounidense, reconoce al Clan del Golfo como el principal exportador de cocaína del país y una amenaza significativa para la seguridad nacional de EE.UU., debido a su involucramiento en narcotráfico masivo, violencia, extorsión y tráfico de migrantes. La organización, surgida de estructuras paramilitares desmovilizadas, cuenta con miles de miembros y controla rutas clave en regiones como Urabá y el Caribe colombiano.
La designación implica el bloqueo de activos en EE.UU., prohibición de transacciones con entidades relacionadas y la posibilidad de cargos penales más severos por apoyo material. Además, eleva al grupo al mismo nivel que entidades como ISIS o Al Qaeda en términos de herramientas legales disponibles para su combate.
🇺🇸🇨🇴‼️ | ÚLTIMA HORA — Estados Unidos designó oficialmente al Clan del Golfo como organización terrorista extranjera, un golpe histórico al mayor cartel narcotraficante de Colombia que controla rutas clave de cocaína hacia Norteamérica y Europa. pic.twitter.com/6PUNYn88ip
— UHN Plus (@UHN_Plus) December 16, 2025
El anuncio coincide con las negociaciones de paz que mantiene el Clan del Golfo con el gobierno del presidente colombiano Gustavo Petro en Qatar, como parte de su política de "paz total" para desmovilizar grupos armados. Fuentes gubernamentales colombianas indicaron que buscan avanzar en los diálogos para hacerlos "irreversibles" antes del cambio de administración en Washington en 2026, aunque la medida estadounidense podría complicar el proceso al endurecer la postura contra concesiones políticas.
Líderes actuales, como Jobanis de Jesús Ávila Villadiego, alias Chiquito Malo, principal comandante tras la extradición de Dairo Antonio Úsuga ("Otoniel"), enfrentarán mayor escrutinio y posibles recompensas por información que lleven a su captura.
Esta acción forma parte de una estrategia más amplia de la administración Trump contra organizaciones criminales transnacionales, similar a designaciones previas de carteles mexicanos y grupos como Tren de Aragua y MS-13. Expertos señalan que, aunque el Clan del Golfo no tiene objetivos políticos explícitos como guerrillas tradicionales, su capacidad para generar violencia y desestabilización justifica la clasificación terrorista en el contexto de la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado. La medida refuerza la cooperación bilateral en seguridad, pero genera interrogantes sobre el impacto en los esfuerzos de paz en Colombia.
