Estados Unidos y Japón firmaron un acuerdo estratégico para garantizar el suministro de minerales críticos y tierras raras, en un esfuerzo por fortalecer la resiliencia de las cadenas de suministro frente a las restricciones impuestas por China. El pacto fue suscrito este martes en Tokio durante la reunión entre el presidente Donald Trump y la primera ministra Sanae Takaichi, en el marco de la gira asiática del mandatario estadounidense.

Según la Casa Blanca, el objetivo del acuerdo es “lograr la resiliencia y la seguridad de las cadenas de suministro de minerales críticos y tierras raras”, esenciales para la fabricación de imanes permanentes, baterías, catalizadores y materiales ópticos. Ambos países se comprometen a identificar conjuntamente proyectos para abordar brechas en la cadena de suministro y movilizar apoyo gubernamental y del sector privado.
Trump y Takaichi confirmaron su “firme compromiso” con la implementación del acuerdo, destacando que este “fortalecerá la seguridad económica, promoverá el crecimiento y conducirá a la prosperidad mundial”. En la declaración conjunta, los líderes subrayaron la importancia de diversificar los mercados de la industria minera mediante políticas económicas e inversiones coordinadas.
Refuerzo de la alianza estratégica
Durante el encuentro en la residencia oficial de la primera ministra, Trump afirmó que Estados Unidos y Japón mantienen “una alianza del nivel más fuerte” y felicitó a Takaichi por ser la primera mujer en ocupar el cargo: “Es un gran logro. Harán un trabajo fantástico y tendremos una relación fantástica”. Por su parte, Takaichi expresó su deseo de inaugurar “una nueva era dorada de la Alianza Japón-Estados Unidos”, donde ambos países se vuelvan “más fuertes y prósperos”.
Trump también se comprometió a apoyar a Japón en todos los ámbitos: “Haremos todo lo que podamos para ayudar a Japón”, en un encuentro que combinó gestos diplomáticos con avances concretos en seguridad económica.
Contexto geopolítico y comercial
El acuerdo se produce en un momento de creciente tensión con China, que ha endurecido los controles sobre la exportación de tierras raras, un recurso crítico para la industria tecnológica y de defensa. Estados Unidos busca reducir su dependencia de Pekín, que domina más del 80% del suministro global de estos materiales.
Tras la firma, Trump se reunió con familias de japoneses secuestrados por Corea del Norte hace décadas, reafirmando el apoyo de Washington: “Estados Unidos está con ellos en todo el camino”. Pyongyang admitió en 2002 haber secuestrado a 13 ciudadanos japoneses para entrenar a sus espías.
Próximos pasos en la gira asiática
Trump llegó a Tokio el lunes tras participar en la cumbre de la ASEAN en Malasia, donde impulsó acuerdos comerciales y un alto el fuego entre Tailandia y Camboya. El jueves se reunirá en Corea del Sur con el presidente chino Xi Jinping, en un intento por aliviar la guerra comercial desatada por los aranceles estadounidenses. Negociadores de ambos países confirmaron un “marco de acuerdo” preliminar para resolver diferencias comerciales.
Este pacto con Japón refuerza la estrategia de Trump de consolidar alianzas en el Indo-Pacífico para contrarrestar la influencia china, al tiempo que asegura recursos clave para la industria estadounidense y global.
(Con información de AFP)