María Corina Machado, premio Nobel de la Paz de origen venezolano, dejó Venezuela el martes a bordo de una embarcación con destino a la isla caribeña de Curazao en una operación secreta, según informaron funcionarios estadounidenses. El propósito del viaje era iniciar su trayecto hacia Noruega para recoger personalmente su galardón.
Los aliados de la líder opositora, cuyas identidades no se hicieron públicas, organizaron el traslado bajo estricta reserva para proteger su seguridad. De acuerdo con los mismos funcionarios estadounidenses, el itinerario se mantuvo confidencial hasta que Machado pudo abandonar el territorio venezolano.
La Nobel de la Paz no logró llegar a tiempo para la ceremonia oficial de entrega del premio el miércoles, aunque aseguró que viajaría a Oslo, disipando inquietudes sobre su paradero después de que el Comité Nobel afirmara desconocer dónde se encontraba. Durante el último año, Machado permaneció oculta en Venezuela para evitar su detención, y el traslado a Oslo plantea el riesgo de que deba exiliarse.
En una conversación telefónica con Jørgen Watne Frydnes, presidente del Comité Nobel, publicada en el sitio web del Premio Nobel de la Paz, Machado declaró sentirse profundamente agradecida y emocionada por el reconocimiento: «Tantas personas arriesgaron sus vidas para que yo pudiera viajar a Oslo. Estoy muy agradecida con ellas. Y esto es una muestra de lo que este reconocimiento significa para el pueblo venezolano», señaló, antes de tomar el vuelo a Noruega. Añadió: «Me siento muy emocionada y honrada, y por eso lamento mucho y siento decirle que no podré llegar a tiempo para la ceremonia, pero estaré en Oslo, y estoy en camino a Oslo ahora mismo».
