La policía en el estado de Nevada, en el oeste de Estados Unidos, ha realizado varios arrestos relacionados con el transporte de grandes cantidades de drogas ilegales destinadas al festival anual Burning Man, un evento masivo en el desierto de Black Rock que atrae a miles de participantes cada año por sus expresiones artísticas y culturales. Según New York Post, las detenciones ocurrieron antes del inicio oficial del festival este domingo, destacando la vigilancia intensificada en rutas hacia el sitio remoto.

De acuerdo a Reno Gazette Journal, el Departamento del Sheriff del Condado de Pershing arrestó a dos personas el jueves durante paradas de tráfico rutinarias, descubriendo una cantidad significativa de drogas en sus vehículos. El sheriff Jerry Allen explicó que las detenciones surgieron de violaciones menores, pero las búsquedas revelaron cargamentos destinados al festival, que dura nueve días y fomenta un ambiente de libertad creativa en un desierto árido de Nevada.

¿Qué drogas fueron confiscadas en estos incidentes? En una detención separada el miércoles en Yerington, una ciudad cercana, la policía local apresó a un hombre de 48 años con un arsenal variado: 104 gramos de crack cocaína, 6,1 gramos de metanfetamina, éxtasis, hongos psilocibina, LSD, oxicodona, vicodina, valium y xanax, según KOLO. El individuo admitió que se dirigía a Burning Man, un evento que se celebra desde 1986 y que este año espera recuperar niveles de asistencia previos a la pandemia, con miles congregándose en un campamento temporal.

En un artículo de San Francisco Chronicle, se menciona que un perro policía detectó las drogas en una furgoneta de carga, subrayando el uso de canes entrenados en operaciones previas al festival. Las autoridades han duplicado la cantidad de Narcan disponible a 100 dosis, un aerosol nasal que revierte sobredosis de opioides, y asignado más de 20 sheriffs al sitio para manejar emergencias médicas y de seguridad.

¿Cómo afecta esto al festival? Organizadores esperan una mayor afluencia, pero pronósticos de lluvias podrían complicar las actividades en el desierto, donde participantes construyen instalaciones artísticas efímeras. Este tipo de arrestos resalta los desafíos de mantener el orden en un evento conocido por su ethos de radical inclusión, aunque las autoridades enfatizan la prevención de actividades ilegales que ponen en riesgo a los asistentes.